martes, 6 de marzo de 2012

VIVIR DEPRISA, NO ES VIVIR...


Carl Honore, el guru anti-prisa y autor del éxito mundial “Elogio de la lentitud” , nos ofrece en su libro estas reflexiones:
“Creo que vivir deprisa no es vivir, es sobrevivir.
Nuestra cultura nos inculca el miedo a perder el tiempo,
pero la paradoja es que la aceleración nos hace desperdiciar la vida.”
“Hoy todo el mundo sufre la ENFERMEDAD DEL TIEMPO:
la creencia obsesiva de que el tiempo se aleja y
debes pedalear cada vez más rápido”
“La velocidad es una manera de no enfrentarse a lo que le pasa a tu
cuerpo y a tu mente, de evitar las preguntas importantes…
Viajamos constantemente por el carril rápido, cargados de emociones,
de adrenalina, de estímulos, y eso hace que no tengamos nunca el tiempo
y la tranquilidad que necesitamos para reflexionar y preguntarnos
qué es lo realmente importante.”




Vamos a describir las cosas de nuestra vida que pensamos que merecen hacerse 
 lentamente, sin prisas...

Hoy día cuando veo a mis hijos ya mayores me pregunto ¿ Cómo ha pasado el tiempo ?. Me acuerdo cuando los levantaba por la mañana, les daba el desayuno, los llevaba y traía de la escuela, siempre pendiente del reloj. Mi vida era un ir y venir siempre pendiente de ellos, de tener su comida preparada, de sus ropas limpias en fin, lo que toda madre hacemos por nuestros hijos.
Hoy día veo que todo ese tiempo que me faltaba, hoy en cierto modo, ya me está sobrando. Mis hijos son mayores, van y vienen sin yo hacerle falta, en definitiva ya se valen por ellos mismos. Y para mi es un orgullo y una felicidad inmensa ver a esos hijos hechos personas adultas y responsables.
Ahora empezaré a mirar un poco más por mi, por mi marido y como no por esos nietos que algún día llegarán, pero, espero tomarme la vida un poco más tranquila y pausada porque ya lo vivido te sirve de experiencia. Reflexionaré que es lo más importante y lo haré saboreando cada instante que me queda por vivir. Como escribir estas líneas sin pensar en el tiempo que habre tardado.